Detalle:Con la creación de esta área protegida, la APN incorporó un tipo de ambiente que hasta ahora no se encontraba representado, las mesetas de altura santacruceñas y con ella la protección de una importante reserva hídrica para las localidades linderas.
Su riqueza arqueológica asombra por su gran cantidad y variedad, conforma en sí misma un conjunto de valores histórico-culturales de inigualable esplendor unidos a los valores de la cercana Cueva de las Manos.
Sus paisajes muestran una gran cantidad de conos volcánicos, extensas mesetas escalonadas, cañadones y vastas llanuras con extensos pastizales entre innumerables rocas volcánicas.
Desde la reserva hídrica que el Parque Nacional protege descienden ríos, arroyos y manantiales que aseguran la provisión de agua a una amplia región. Además de cientos de lagunas, en la Meseta se forman ríos como el Ecker, Pinturas, Los Antiguos, Columna, Correntoso, numerosos arroyos estacionales y permanentes, mallines y vegas. Entre estos cuerpos de agua se destaca, el de la inmensa Laguna Del Sello (o Vía Láctea), con más de 6 km de ancho por 3 km de largo, humedal sumamente importante para la nidificación y alimentación de las aves migratorias, entre las que se destaca el Maca Tobiano (Podiceps gallardoi).
Otros aspectos destacables de esta área protegida son los altos endemismos de flora y fauna que presenta, entre los que destacan animales como el carismático Macá Tobiano (Podiceps gallardoi) especie exclusiva de Santa Cruz, y especies vegetales como la (Viola auricolor) y la (Moschopsis ameghinoi), especies del género Calceolaria y lagartijas muy poco estudiadas como la Lagartijas (Liolaemus archephorus, Liolaemus silvanae y Liolaemus avilae), entre otros.